Las llamas avanzaron sin aviso y en pocos minutos cambiaron el rostro de una tranquila mañana en la población Padre Hurtado de Puerto Montt. Una vivienda de dos pisos, ubicada en la intersección de Padre Francisco Javier con Volcán Apagado, resultó completamente destruida tras un incendio estructural que se concentró con mayor fuerza en su segundo nivel.

La emergencia fue advertida de manera fortuita por un bombero que transitaba por el sector, quien al percatarse del fuego dio la alerta que permitió activar rápidamente el despliegue de Bomberos. A los primeros voluntarios que llegaron de forma espontánea, se sumaron unidades de cinco compañías que trabajaron intensamente para contener el siniestro y evitar que el fuego se propagara a inmuebles colindantes, uno de ellos ubicado a escasa distancia.

El tercer comandante del Cuerpo de Bomberos, Daniel Hurtado, explicó que la estrategia inicial fue defensiva, utilizando equipos de alto caudal para atacar el fuego desde el exterior. Una vez disminuida la intensidad de las llamas, las unidades ingresaron al interior para un combate más focalizado, aunque los daños ya eran irreversibles.

A las 08.19 horas se confirmó la destrucción total del inmueble, con pérdida completa del segundo piso y daños severos en el primero. Tras la emergencia, el oficial reiteró el llamado a la comunidad a avisar oportunamente a Bomberos ante cualquier indicio de incendio, subrayando que cada minuto puede marcar la diferencia entre el control del fuego y la pérdida total.

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