Un preocupante diagnóstico reveló el Servicio Local de Educación Pública (SLEP) Chiloé tras asumir la administración de 210 establecimientos educacionales el pasado 1 de enero. Solo el 5% de las escuelas se encuentra en buen estado, mientras que el resto evidencia diversos grados de deterioro: 40% con daños leves, 37% con afectaciones moderadas, 13% con problemas estructurales. A ello se suma un alarmante 2%, equivalente a cuatro recintos con pérdida total.

Filtraciones por lluvias, fallas en sistemas eléctricos y serias deficiencias sanitarias destacan entre los principales problemas. Más del 50% de los establecimientos carece de certificaciones sanitarias, el 90% tiene extintores vencidos y más de 10.000 luminarias están en mal estado. También persisten falencias en calefacción, control de plagas y sistemas de emergencia.

Frente a este crítico escenario, el director del SLEP, Pablo Baeza, anunció la ejecución de 10 proyectos de conservación por $312 millones durante este año. Antecedentes que fueron expuestos por Johnatan Valenzuela, coordinador de la Subdirección de Infraestructura y Mantenimiento de SLEP Chiloé.

Las intervenciones se enfocarán en escuelas de Bahía Linao Aucar, Calen, San Javier, Teresa Cárdenas de Paredes, Manuela Cárdenas, Huillinco, Juan Bautista Chiguay y Kume Ruka.