Un conmovedor caso ha impactado al Hospital de Puerto Montt. Se trata de la historia Alondra, una pequeña de tres años, quien ha logrado recuperar parte de su movilidad tras haber quedado paralizada por una enfermedad autoinmune.

Los hechos se remontan al 25 de noviembre del pasado año, cuando la niña experimentó una parálisis total que le impedía hablar, mover su cuerpo e incluso respirar con normalidad. En la oportunidad fue trasladada desde Calbuco en un estado crítico, lo que causó una gran preocupación en su familia.

Inicialmente, el personal médico sospechó del  síndrome de Guillain-Barré (rara afección autoinmune afecta los nervios). No obstante, exámenes posteriores arrojaron que se trataba de una inflamación significativa en la médula, lo que indicaba una enfermedad autoinmune. Confirmado el diagnóstico, el equipo médico comenzó un tratamiento con plasmaféresis y corticoides en dosis elevadas.

Transcurridas tres semanas de tratamiento, Alondra empezó a mostrar signos de mejoría. En la actualidad, ya no necesita ventilación mecánica, puede mover su cabeza y hablar, lo que ha llenado de felicidad a su familia y al equipo médico.

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